Nuestra Historia
El Instituto Adventista de Paraná (IAPa), originalmente conocido como Escuela Braulio Pérez Marcio, nació en marzo de 1980 gracias al impulso de un grupo de madres de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Con amor, fe y visión, dieron apertura a un Jardín de Infantes y Primer Año de EGB, sentando las bases de una comunidad educativa centrada en los valores cristianos.
Ese mismo año se designó como directora a la Sra. Teresa Desía de Zawadsky y como docente a la Sra. Sonia Palacios. La primera aula se construyó detrás del templo adventista existente en el terreno, marcando así los primeros pasos de esta institución.
Inicialmente, la escuela se llamó “Eduardo Laurencena”, en honor al exgobernador de Entre Ríos. Sin embargo, en 1990, y a pedido de la comunidad escolar, se adoptó el nombre actual en reconocimiento al escritor y pensador adventista Braulio Pérez Marcio. La biblioteca escolar conserva el nombre original como muestra de gratitud.
Con el paso del tiempo, el IAPa creció tanto en matrícula como en infraestructura. En 1995 y 2000 se adquirieron terrenos contiguos que permitieron ampliar aulas, patios y servicios. En 1999 se sumó el Tercer Ciclo de EGB, cumpliendo así con toda la educación obligatoria. En 2005, mediante la Resolución N° 2714, se aprobó la creación del Nivel Medio con orientación en Administración, dando nacimiento oficial al Instituto Adventista de Paraná bajo esa denominación.
En los años siguientes, el IAPa continuó desarrollándose: en 2008 se inauguraron nuevas aulas y en 2009 se adquirió otro terreno para ampliar el Nivel Inicial. En 2019, en respuesta a la demanda de familias provenientes de otras escuelas adventistas, se inauguró el turno tarde en el nivel secundario.
Durante los años siguientes, se sumaron nuevos cursos y en 2022 comenzó a funcionar el Ciclo Orientado en Ciencias Naturales, lo que culminó con la graduación de la primera promoción en esa orientación a fines de 2024. Ese mismo año también se iniciaron obras de remodelación en las oficinas y sanitarios del nivel primario.
Hoy, el IAPa continúa ofreciendo una educación integral, comprometida con el crecimiento académico, espiritual, social y emocional de cada estudiante. Integrado a la red mundial de Educación Adventista, mantiene viva su misión de formar líderes con valores, preparados para servir a Dios y a la comunidad.